Qué ver y hacer en Hildesheim

Castillo del siglo XIX con visitas guiadas. El castillo de Marienburg es un castillo neogótico en Baja Sajonia, Alemania. Está situado a 15 km al noroeste de Hildesheim, y alrededor de 30 km al sur de Hannover en el municipio de Pattensen, Hannover. Era una residencia de verano de la Casa de Welf.

El castillo fue construido entre 1858 y 1867 como regalo de cumpleaños del rey Jorge V de Hannover (reinado 1851-1866) a su esposa María de Sajonia-Altenburgo. Entre 1714 y 1837 virtualmente no existía ninguna corte real en Hannover ya que la Casa de Hannover gobernaba los reinos de Hannover y Gran Bretaña en unión personal, así que el castillo también fue construido para servir como sede adecuada para la Casa de Hannover en Alemania. Su arquitecto fue Conrad Wilhelm Hase, uno de los arquitectos más influyentes de Hannover.

Después de la anexión de Hannover por Prusia en 1866 y la salida de la familia real al exilio, el castillo estuvo deshabitado durante 80 años, permaneciendo también en buen estado de conservación, ya que se realizaron pocas reformas a la vuelta de la familia tras 80 años.​

Hasta finales de 2018 fue propiedad del Príncipe Ernesto Augusto de Hannover, después de que su padre le cediera el castillo y todas las propiedades reales en herencia. El castillo albergaba las oficinas de gestión del patrimonio de la Casa de Hannover y servía como su sede oficial. Algunas de sus partes están abiertas al público, como el museo del castillo, el restaurante, la capilla, y puede reservarse como localización para eventos sociales (recepciones, conciertos, bodas, etc.).

Tras siete largos años de negociaciones, el príncipe Ernesto Augusto de Hannover ha cedido y ha firmado finalmente la entrega del castillo al Estado Federado de Baja Sajonia en una transacción simbólica a cambio de un euro, cantidad testimonial por la que pasa a pertenecer al Estado. A partir del año 2020 arrancarán las costosas obras de renovación del castillo, para las que serán destinados 27 millones de las arcas públicas.^[2]

Museo en Hildesheim, Alemania. El Museo de la Catedral de Hildesheim es el museo diocesano que consiste del tesoro de la diócesis de Hildesheim, la segunda más grande de las 27 diócesis de Alemania.​ El tesoro de la catedral de Hildesheim es considerado de los más importantes del mundo,​ y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985.​​

El museo ilustra más de mil años de historia y arte eclesiástico en Baja Sajonia.​ Está instalado en las históricas habitaciones alrededor del claustro de la catedral de Hildesheim, y tras los trabajos de renovación de 2010, tanto la cercana iglesia de San Antonio (Antoniuskirche) como parte del claustro de la catedral se convirtieron en espacio de exhibiciones.^[7]

Iglesia católica en Hildesheim, Alemania. La Basílica de San Gotardo​ ​ es una iglesia románica en Hildesheim,​​ Alemania, antes la iglesia de una abadía benedictina. Se mantuvo casi inalterada a través de los siglos y no sufrió daños considerables en la Segunda Guerra Mundial. En 1963, se le otorgó el título de basílica menor por parte del Papa Pablo VI. Se trata de una iglesia de la parroquia católica de Heilig Kreuz. La basílica sirvió como la "catedral" del obispo de Hildesheim 1945-1960, cuando la catedral de Hildesheim fue destruida y reconstruida, y desde 2010, cuando comenzó la restauración de la catedral. Una araña Hezilo fue instalada en San Gotardo durante el tiempo de restauración.

Godehard de Hildesheim, un benedictino y un influyente obispo de Hildesheim 1022-1038, fue canonizado en 1133. El mismo año, el obispo Bernard de Hildesheim fundó el monasterio y la iglesia en su honor. La iglesia fue terminada en 1172 y consagrada por Bischof Adelog de Santa María y San Gotardo.

Los antiguos edificios del convento se utilizan para la Fachhochschule für Verwaltung und Rechtspflege (Universidad de Ciencias Aplicadas de administración y Derecho).^[8]

El convento de Marienrode es un convento benedictino en Marienrode, un distrito de Hildesheim en Alemania.

El obispo de Hildesheim, Berthold I von Alvensleben, fundó aquí un monasterio de agustinos en 1125, en un lugar conocido entonces como Baccenrode. Duró hasta 1259. El lugar fue repoblado posteriormente, primero por agustinos y después como monasterio cisterciense. Los cistercienses dieron a la comunidad su nombre actual de Marienrode, que se utiliza oficialmente desde 1439. La primera piedra de la iglesia actual se colocó en 1412. La iglesia se construyó en estilo gótico con tres naves y se terminó en 1462. La torrecilla barroca de la cresta se añadió en el siglo XVIII. En la iglesia destacan dos altares barrocos que datan de 1750 aproximadamente y una escultura gótica de piedra arenisca de Santa María realizada en 1460. El órgano data de mediados del siglo XVIII. La mayoría de los edificios actuales del monasterio, de piedra arenisca, fueron construidos en el siglo XVIII. En el patio interior destaca una torre de palomas. Tras la secularización de 1806, el monasterio se utilizó como granja hasta 1987.

Una pequeña capilla del priorato, San Cosme y Damián, construida en 1792, se convirtió en una pequeña iglesia protestante en 1830. No sólo la utilizan los protestantes que viven en Marienrode, sino también los de Neuhof y Hildesheimer Wald, dos barrios de Hildesheim que no tienen iglesias. El altar data de 1835 y el órgano de finales del siglo XVIII. Según la tradición cisterciense, la capilla tiene una torrecilla en lugar de una torre.

A partir de 1983, el nuevo obispo de Hildesheim, Josef Homeyer, se dedicó a restablecer las casas monásticas. Así, el 5 de mayo de 1988, el priorato de Marienrode fue reubicado por diez monjas benedictinas de la abadía de Eibingen. Desde 1998, Marienrode es un priorato independiente dentro de la Congregación Beurona.

Alrededor del priorato se desarrolló un pequeño pueblo (Marienrode) que se incorporó a Hildesheim en 1974. La antigua escuela del pueblo, gestionada por el priorato, se construyó en 1716. El molino de viento de Marienrode se construyó en 1839 y se utilizó como tal hasta 1939. Desde el pueblo se puede acceder a él a través de una avenida arbolada formada por tilos de 200 años, con un pavimento histórico. El gran estanque de peces en el sur del pueblo fue trazado por los cistercienses en la Edad Media.^[12]

La Magdalenenkirche o Santa Magdalena es una de las iglesias de Hildesheim, Baja Sajonia, Alemania. La Magdalenenkirche es una iglesia católica que en su día fue una iglesia monasterio, y está situada en el casco antiguo, en el número 25 de la calle Mühlenstraße.

Fundado en 1224, el edificio actual fue consagrado en 1294, siendo el primer edificio gótico de Hildesheim. En el siglo XV se llevó a cabo una amplia reconstrucción y en el siglo XIX se hicieron nuevas adiciones. En el siglo XV (hacia 1416) se realizó un retablo de un artista desconocido, denominado Meister des Göttinger Barfüßeraltars, que representa escenas de la vida de María Magdalena (Magdalenenlegende). Desde entonces, se ha fragmentado y se encuentran varios paneles en diferentes museos. Uno de ellos, el Noli me tangere, se encuentra en la Staatsgalerie de Stuttgart.

La iglesia sufrió graves daños en la Segunda Guerra Mundial, el 22 de marzo de 1945, y fue parcialmente restaurada de forma simplificada. La restauración se completó en 1961. En las proximidades se encuentra el Magdalenengarten, un parque barroco construido entre 1720 y 1725. En la pequeña calle Süsternstraße, junto a la iglesia, se encuentra una parte bien conservada de la muralla medieval con una torre redonda.^[15]